Evita cometer los mismos errores que el resto con los desperdicios del Lean Manufacturing

La mayoría de las empresas dedican parte de sus esfuerzos a procesos innecesarios. Estas decisiones provocan retrasos en las entregas de trabajo, insatisfacciones y, en consecuencia, descontento. ¿Te gustaría ir un paso por delante? El Lean Manufacturingdel cual te hemos hablado anteriormente, te ayuda a focalizarte en lo valor añadido y conseguir implantar en tu empresa un proceso de mejora continua.

En Vaware Labs te explicamos cuáles son los 8 desperdicios empresariales, que se cometen regularmente, para conseguir que tu flujo de trabajo sea efectivo y rápido. ¡Vamos a ello!

Tipos de desperdicio

En Lean se conoce como desperdicio todo aquello que no aporta valor a la empresa y, por lo tanto, se debe de eliminar. Existen 8 tipos de desperdicios empresariales que debes conocer:

– Sobreproducción

Se trata de producir más de lo necesario. ¿A quién no le ha pasado que se ha centrado en crear algo innecesario? Ahora es momento de producir únicamente lo necesario. ¡Trabajar de forma eficiente es la clave!

– Transporte

Mover trabajo de un lado a otro, incluso en distancias cortas, cuando no es imprescindible es un desperdicio. Todos estos movimientos requieren de personal, material o productos que se pueden estar utilizando para otras cosas. ¡Evítalo!

– Tiempo de espera

Son tiempos perdidos o muertos que han hecho que el trabajo no fuera todo lo óptimo posible. Buenos ejemplos son trabajadores esperando información para poder avanzar, material que falta o clientes esperando respuestas.

– Exceso de procesos

¡Hay que evitar la sobrecarga de pasos! Se trata de la producción de material que en ese momento no era importante: documentos que no van a ser vistos o trabajo extra son algunos ejemplos.

– Inventario

Stock acumulado que ocupa espacio y que impide la gestión adecuada de ciertas tareas. Como dice Marie Kondo: “Soltar cosas es aún más importante que añadirlas”. Es momento de dejar de guardar lo que no utilizas y no aporta valor al cliente.

– Movimientos

Movimientos de todo tipo: de personas, materiales o transporte. Esto es debido a una falta de organización en la empresa. Evitar tener personal subiendo y bajando documentos o buscando material que no importa. ¡Focaliza!

– Defectos en el producto

Controla el producto para evitar defectos que puedan hacer paralizar o retrasar el flujo de trabajo. Con ello, nos evitaremos productos devueltos o quejas de los clientes.

– Personal subutilizado

¡El talento del personal se tiene que utilizar! Este despilfarro consiste en el no uso de la creatividad del trabajador. ¿Cuando suele ocurrir ello? En entornos empresariales antiguos, donde el empleado solo puede opinar de lo suyo o donde su formación no es importante.

Eliminar estos desperdicios y focalizarte únicamente en lo importante te ayudará a mejorar el flujo de trabajo de tu empresa. ¡Pruébalo!

Esperamos que te haya sido útil este artículo y si te ha gustado, ¡compártelo!